LA JERARQUÍA DE LOS ÁNGELES
A
Rilke
Mi irresponsabilidad llega hasta la vastedad
Mi nombre se divide vacuo y laberíntico
Frente a la encrucijada del tiempo
Los años ya tapian la enredadera
Que una vez fue mi primer deseo
Reconozco al final del mausoleo
El lugar preciso en que yace irreconocible
El recuerdo oxidado de cuanto fui
Me aturde el clamor de mil bocas pobladas de barro
Ahogando mis pálidas señales
Las horas inexorables de este ciclo cerrado
Que aún añoro
Mariano Esquivel, Caracas 1992
No hay comentarios:
Publicar un comentario